Y a la hora de pensar a qué lugar ir, uno de los factores más determinantes es el económico, sobre todo si se trata de un destino internacional. En ese momento es cuando aparece la disyuntiva: ¿conviene ir al país vecino o mejor vacacionar en la Argentina? ¿Brasil está muy caro o no es para tanto?
Periodistas de La Voz días atrás recorrieron las góndolas de un supermercado de Florianópolis, y registró los precios de los principales productos que suele consumir una familia en época de vacaciones.
Los precios fueron calculados con la conversión del día, en el que un real (moneda brasileña) equivale a unos 75 pesos argentinos.
FRUTAS Y VERDURAS
Por el lado de la verdulería, el kilo de papas en Brasil cuesta 375 pesos un paquete de lechuga, 200 el kilo de limón, 360 y el de palta 330.
PRODUCTOS DULCES
El pote de dulce de leche más famoso de Brasil, de marca “Mumu”, cuesta 570 pesos y las tabletas de chocolate van entre los 400 y los 600 pesos. Si hablamos de galletitas, un paquete de “Oreo” de 270 gramos ronda los 800 pesos, y de obleas algo más de 200.
El kilo de azúcar, en tanto, vale casi 300 pesos, más o menos como en nuestro país.
BEBIDAS
En cuanto a las bebidas, la botella de Coca Cola de 2,5 litros está en 700 pesos.
Respecto de las bebidas con alcohol, los vinos en el país vecino son realmente caros. Por ejemplo, el “Portillo” ronda los 8.000 pesos.
En tanto, la lata de cerveza Heineken de 330 mililitros está 450 pesos, mientras que la marca “Skol”, una de las más consumidas en Brasil, cuesta alrededor de 200.
El bidón de agua mineralizada de 10 litros sale 800 pesos. Cabe aclarar que el Ministerio de Salud argentino recomendóno tomar agua de la canilla y consumirla “filtrada, tratada o hervida” debido a la epidemia de diarrea en Florianópolis.
PRODUCTOS DE HIGIENE Sobre los productos de higiene personal, un desodorante en aerosol cuesta 1.200 pesos. Los precios de los potes grandes de champú y acondicionador varían entre los 1.800 y los 2.000 pesos, según la marca. Respecto a los jabones, el de barra cuesta 200 pesos, mientras que el jabón líquido para lavar la ropa de la marca más económica sale alrededor de 900 pesos. En cuanto a la yerba mate, hay muy poca variedad en Brasil, no había ninguna marca argentina. El kilo de “Rei Verde” cuesta 1.100 pesos, mientras que el medio kilo de “Catanduvas” sale 525 y el de “Regina” 570. La botella de aceite de 900 mililitros cuesta poco más de 1.000 pesos argentinos. A la hora de planificar las vacaciones “por la propia”, el costo del combustible es uno de los principales a tener en cuenta. Y si el destino elegido es Brasil, más todavía. En el sur brasileño el precio de la gasolina común (la súper nuestra) varía entre los 4,95 y los 5,15 reales, que al cambio de 75 pesos por real significa un costo de entre 371 a 386 pesos por litro. Bastante más que el precio que el litro de nafta tiene en Argentina. En Brasil también se vende una versión Premium (“aditivada” la llaman allá), que no es mucho más cara que la versión común: entre 5,10 y 5,30 reales por litro. Los mecánicos advierten que el combustible brasileño es de menor calidad que el que se vende en Argentina, ya que tiene un mayor porcentaje de alcohol. En algunas estaciones del vecino país también se despacha una gasolina sin alcohol, pero es mucho más cara, del orden de los 7,30 reales por litro, equivalente a casi 550 pesos argentinos. El costo de los peajes ronda entre los 2,40 y los 4,70 reales (entre 200 y 400 pesos de los nuestros) según la ruta o autopista transitada. De esta forma, teniendo en cuenta estos valores del combustible y los peajes, el costo de traslado (ida y vuelta al sur brasileño) se ubica en torno a los 100 mil pesos. En este cálculo se estima que se carga nafta argentina antes de cruzar la frontera e ingresar a Brasil, y al regreso apenas se traspasa la Aduana. Un choclo con manteca y sal en una playa del sur de Brasil cuesta unos 10 reales ($ 750). Lo mismo sale el queso “quemado” o un churro con dulce de leche o chocolate. Los helados de los vendedores ambulantes rondan entre 7 y 15 reales (entre $ 500 y $ 1.000). Tomar una caipirinha con limón o frutas en la playa cuesta entre 20 y 25 reales ($ 1.500 a $ 1.900), dependiendo si se prepara con cachaça o vodka. En la playa todos aceptan pago con débito o crédito. A la noche, comer en un bar o restorán en un balneario de Brasil es algo más caro que hacerlo en un lugar turístico nacional. Por ejemplo, una hamburguesa en un lugar de comidas rápidas ronda entre los 22 y los 35 reales, lo que equivale a 1.600 y 2.600 pesos argentinos. Un plato preparado con carne o pescado en un restorán ronda entre los 40 y los 80 reales (de 3.000 a 6.000 pesos). Una pizza para dos o tres personas vale entre 30 y 50 reales. A todo ello hay que sumar el costo de las bebidas.Supermercado mayorista en Florianópolis.
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