Él la conocía a Lola desde muy chica, ya que fue compañera de su hija desde la primaria. Un verano en Punta del Este en que ella tenía 20 años, y él estaba triste porque su mujer los había abandonado repentinamente, comenzaron a mirarse con otros ojos. La época de la clandestinidad y la reacción de su mejor amiga al enterarse